Salud

Demodexia canina

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La Demodexia Canina, una sarna muy especial

La demodexia canina, también conocida como sarna roja o sarna demodéctica, no es una enfermedad contagiosa para otros perros ni para las personas, ya  que sólo la desarrollan los animales predispuestos a ella.

Las causas de la demodexia canina

Esta tendencia a padecerla es hereditaria, por lo que se recomienda que los perros que sufren demodexia no se reproduzcan, para evitar pasar a sus cachorros este problema que puede llegar a ser bastante serio y difícil de controlar.

Esta enfermedad es relativamente frecuente en los perros y puede producirse por otras causas adicionales: Por un lado, por el ácaro Demodex sp, que es un parásito que se aloja dentro de los folículos pilosos de la piel.

Cuando éstos ácaros se multiplican excesivamente causan caída del pelo, y una notable inflamación de la piel.

Lo que hace esta sarna especial es que el ácaro Demodex es un habitante normal de la piel de la mayoría de los perros, gatos e incluso personas, pero sólo algunos perros contraen la enfermedad.

El segundo causante es que el animal presente una incapacidad del sistema inmune para combatir este parásito, y no pueda mantenerlo a raya.

Una tercera causa para contraer la Demodexia Canina es el estrés: El perro puede presentar un cuadro de estrés agudo, lo que originará una deficiencia del sistema inmunológico.

Por regla general, la enfermedad aparece en cachorros a partir de los 4 meses. Estos pueden mejorar tras un tratamiento, y no volver a tener recaídas o, por el contrario, volver a enfermar durante el resto de su vida ante cualquier situación que le produzca una disminución de las defensas.

El estrés canino y la relación con la demodexia canina

El estrés es un proceso que se inicia ante un conjunto de demandas ambientales que recibe el individuo, a las cuales debe dar una respuesta adecuada.

Cuando la demanda del ambiente (épocas de celo, territorio, poblaciones, etc) es excesiva frente a los recursos de afrontamiento, se van a desarrollar una serie de reacciones adaptativas, de movilización de recursos, que implican una activación fisiológica.

Si ésta es negativa produce una serie de reacciones emocionales como ansiedad, ira,  depresión y una considerable disminución de las defensas inmunológicas.

El animal estresado al que le bajan las defensas debido a situaciones de estrés vividas, es susceptible de contraer esta enfermedad.

Los motivos que pueden causar estrés en el perro pueden ser muy variados: intolerancia a las vacunas, alimentos con aditivos químicos, entrenamientos inapropiados, miedos, situaciones de ansiedad, mudanzas, peleas, sustos, agresiones físicas, mala sociabilización.

En fin, una serie de causas que pueden ser puntuales o recurrentes, y que hacen que nuestro animal esté predispuesto a desarrollar la enfermedad.

Si un perro genéticamente predispuesto a desarrollar demodexia por algún motivo desequilibra su energía vital, contraerá la enfermedad. 
Entonces se le puede aplicar dos tratamientos diferentes. Por un lado hay que equilibrar su energía vital, y esto se puede conseguir mediante la homeopatía.

Y por otro lado, hay que disminuir los ácaros demodex presentes con baños con Amitraz, con Ivermectina o Doramectina (los tratamientos tradicionales). Porque si solamente eliminamos los ácaros demodex, la enfermedad vuelve a aparecer al cabo de un tiempo, ya que el desequilibrio de la energía vital continua.

Los síntomas de la demodexia canina

El principal síntoma es la caída de pelo e inflamación de la piel, muchas veces con infecciones secundarias. Sólo provoca prurito cuando la piel se infecta. Se presenta en tres formas distintas:

  • Localizada: Por lo general, se presenta en los cachorros, se observan unos pocos parches aislados de piel sin pelo, principalmente en la cara, alrededor de los ojos, que dan un aspecto «apolillado» al pelaje. La demodexia localizada desaparece sola en un 90% de los casos, sin necesidad de tratamiento. Se recomienda no iniciar el tratamiento si la enfermedad no se extiende, pues de esta forma se logra que el sistema inmune reaccione y la elimine por sí solo. Estos puede durar de uno a tres meses. Si aparecen más de cinco parches, se agrandan los ganglios locales o la piel se infecta, sí deberá empezar a ser tratada por el veterinario.
  • Generalizada: en éste caso, las lesiones sin pelo se pueden ver por todo el cuerpo, afectando especialmente a la cara. La piel presenta muchas costras, con pústulas que en ocasiones pueden sangrar, oleosas al tacto y con un fuerte y desagradable olor. Se suele formar una papada que le da al cachorro un aspecto envejecido.
  • Algunos perros pueden tener también fiebre, decaimiento y pérdida de apetito. En la demodexia generalizada se recomienda comenzar el tratamiento cuanto antes, para lograr controlar la enfermedad lo más rápido posible. La mayoría de los cachorros se recuperan completamente una vez que su sistema inmune ha madurado del todo. En el caso de que un perro adulte desarrolle una demodicosis generalizada, hay que sospechar y descartar alguna causa subyacente que haya bajado las defensas, como un tratamiento con corticoides, una disfunción hormonoal o alguna enfermedad sistémica.
  • Pododemodicosis: en éste caso, la enfermedad se limita a los pies y manos. Siempre hay infecciones secundarias que suelen requerir tratamientos intensos y prolongados. Es la forma más resistente de la demodexia porque los ácaros se encuentran a gran profundidad y son difíciles de eliminar.
  • El diagnóstico de la sarna demodéctica es bastante sencillo: el veterinario puede tener un alto grado de certeza por los signos clínicos, y realizar un raspaje de la piel que confirme sus sospechas. El ácaro es fácil de hallar, pues se encuentra en grandes cantidades en los animales enfermos. Se ve con un microscopio óptico común, sin necesidad de tinciones especiales.

El tratamiento de la demodexia canina

Como parte imprescindible del tratamiento para la demodexia canina, es muy importante identificar las causas de estrés o disminución de las defensas para prevenir recaídas.

Es aconsejable esterilizar a los machos y hembras en estos casos, porque tanto la época del celo, como el interés por las perras en los machos, son situaciones estresantes en las que la demodexia suele reaparecer. Además, hay que recordar que se debe evitar la reproducción de los animales susceptibles de contraerla.

También es importante darle al perro una excelente alimentación, mantener sus vacunas al día, y tenerlo libre de parásitos internos y externos.

Hay que evitar por todos los medios la aplicación de corticoides y otros medicamentos supresores del sistema inmune en estos perros. En los cachorros se considera que el sistema de defensas todavía no está maduro, y se espera que al llegar al año o año y medio logre controlar la enfermedad por sí sólo.

Depilación del área afectada. Todo el cuerpo en la demodexia generalizada. Antibióticos locales o bucales hasta combatir la infección secundaria.

Terapia acaricida:  no se implementa si hay úlceras cutáneas, porque la droga se absorbe.

Demodicosis localizada: Es una enfermedad leve que suele curarse en pocas semanas, con o sin tratamiento.

Su veterinario puede sugerirle una pomada o loción parasitaria suave para frotar la zona afectada. Independientemente de que el veterinario recomiende o no un tratamiento, querrá volver a examinar a su perro en unas cuatro semanas para asegurarse de que la enfermedad no se está propagando.

Demodicosis generalizada:

En la mayoría de los casos esta grave enfermedad puede ser tratada con éxito. El tratamiento de la demodexia canina puede ser largo y costoso, pero la mayoría de los perros se recuperan completamente. En la mayoría de los demás, el trastorno puede ser bien controlado con un tratamiento mensual.

La mayoría de los perros se recuperan después de 4 a 8 tratamientos con intervalos quincenales.

El tratamiento para la demodicosis generalizada consiste en cortar todo el pelo del perro para permitir un mejor contacto de la medicación con la piel, eliminar todas las costras (que pueden requerir sedación o anestesia dependiendo de la extensión), bañarse con un champú medicado para matar las bacterias y eliminar los desechos, y aplicar una solución llamada Amitraz (Mitaban) para matar los ácaros. Este régimen funciona en la mayoría de los perros.

Otra opción es un curso de medicación oral, administrado diariamente durante varios meses.
Las infecciones de la piel subyacentes y la seborrea (escamas) también deben ser tratadas.

Para el veterinario: En comparación con el raspado inicial, un nuevo raspado de la piel debería revelar menos ácaros, y menos formas inmaduras.

Si las lesiones se están extendiendo, hay más ácaros, y la proporción de formas inmaduras en relación con las adultas es alta, entonces el perro debe ser tratado por demodicosis generalizada. La linfadenopatía regional o generalizada es otro indicador de demodicosis generalizada.

Véanse las referencias que figuran a continuación para un examen detallado del tratamiento, incluso de los casos refractarios de demodexia canina.

Para el veterinario: Se debe hacer un raspado de la piel para detectar ácaros demodécticos en todas las enfermedades de la piel de los pies, piodermas y seborreas. Recuerde que un ácaro adulto ocasional visto en el raspado de la piel es consistente con la piel normal.

Más del 50% de los perros con demodicosis generalizada tienen una anemia normocítica, normocrómica y no reactiva, consistente con una infección crónica. Muchos también tienen niveles bajos de hormona tiroidea pero no son hipotiroideos.

Consejos para la cría de perros con demodexia canina:

Los perros que hayan necesitado tratamiento para la demodicosis generalizada no deben utilizarse para la cría, y tampoco sus padres. Otra buena razón para esterilizar a las hembras con demodicosis generalizada es que durante el estro, la enfermedad empeora.

PARA MÁS INFORMACIÓN SOBRE ESTE DESORDEN, POR FAVOR VEA A SU VETERINARIO.

Recursos:

Scott, D.W., Miller, W.H., Griffin, C.E. 1995. Muller and Kirk’s Small Animal Dermatology. pp 417-432. W.B. Saunders Co., Toronto.

Paradis, M. New approaches to the treatment of canine demodicosis in Veterinary Clinics of North America: Small Animal Practice Noviembre de 1999

¿Qué razas se ven afectadas por la demodexia canina?

 

Términos relacionados con el desorden:
sarna roja, sarna folicular, sarna demodéctica

Tipo de enfermedad:
Trastornos cutáneos hereditarios

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Amante de los animales, la naturaleza, y la fotografía. Redacto artículos para mi blog canino, tratando de seleccionar temática que le sea de utilidad al lector, especialmente sobre enfermedades, razas, cuidados y los últimos avances científicos para conocer y cuidar de nuestros fieles compañeros.